Llegas preocupada a la consulta del Psiquiatra y este diagnóstica (basado en tus palabras), que tu hijo es Autista, Asperger, TDAH, TDA, etc. Pero no le pregunta a tu hijo cómo se siente, le hace dos o tres Test y una consulta una vez al mes (en el mejor de los casos). Un diagnóstico, un nivel, y para casa. Como si un diagnóstico sirve para explicar algo.
Sinceramente sales con más preguntas que respuestas.Tu vecina te dice que tu niño es diferente a los otros. (Como si tuvieses la culpa o el niño fuese culpable de no poder expresar sus emociones.
Alguien te da un contacto para una consulta de Psicológica y sin preguntar el modelo que emplea el terapeuta, decides que tu niño tiene que ir o lo matriculad en una escuela de niños con "mal diagnósticos similares".
Vale, tienes una Etiqueta en lo adelante que va a marcar a tu hijo y a tí para justificar sus comportamientos. Nunca más le preguntarás a tu hijo ¿Cómo te sientes?. Cuando te dijeron que era Autista decidiste que ya no puede sentir, es Autista, todo ahora se basa en que es Autista y te convertirás en abanderada del Azul que los marca. Ahora vas enmascarar sus emociones, sus sentimientos, sus pasiones, su falta de comprensión en determinadas situaciones, su evitación y sus características bajo una sola palabra que no explica absolutamente nada: AUTISMO. Te vas a detener a la salida de la escuela a hablar con padres que llevan la misma bandera y pensarás: "Pero mi hijo no hace eso que su hijo hace". Te sentarás en un parque y la madre de otro niño te mirará como una víctima de tener un hijo con esas características.
Entras a Internet y vas a envenenarte lentamente buscando videos que reafirmen tus pensamientos sobre autismo y seleccionarás la información que mejor se adapte a tu percepción, para evitar la culpa que escondes en el fondo desde que un idiota dijo que el Autismo es culpa de las madres y tú le creíste, pero no es cierto.
Así caminamos por la vida y peor, que con una ETIQUETA, vas a enseñar a tu hijo reforzando todas sus acciones y no lo vas a educar en nada, solo lo vas a enseñar a ser AUTISTA y reforzar todas sus necesidades específicas en base al autismo. Porque parece que alguien dijo que todo el mundo tiene que ser igual. Y como todos los niños con etiquetas, no pueden cambiar, tienen que vivir para su etiqueta.
¿Qué hago ahora entonces?
Lo primero que le digo a los padres cuando llegan a mi consulta: Olvida que tu hijo es Autista, comienza a educarlo que no es un enfermo. Esa simple frase comienza a tomar sentido cuando descubre que no hay nada para tu hijo imposible, solo le va a costar un poco más.
De los modelos terapéuticos efectivos para hablaremos en otro artículo.
Pero una sola cosa les digo: TERAPIA COGNITIVO CONDUCTUAL y Análisis funcional de la conducta.